Scott (2007) plantea que, en Internet, una red social es una comunidad virtual en donde los usuarios interactúan con otros usuarios de todo el mundo, con gustos o intereses comunes. Por lo tanto, las redes son como una plataforma de comunicaciones que permite la interacción entre personas conocidas o desconocidas y que se les genera la facilidad de compartir fotos y videos en un lugar de fácil acceso y con la administración de los mismos usuarios.
De acuerdo al mismo autor, la gran aceptación de las redes sociales se debe fundamentalmente a que ofrecen diversas herramientas de comunicación, como búsqueda de contactos, mensajería instantánea, correo electrónico, distribución de información personal, compartir fotos, videos y mensajería instantánea en mensajes de texto. Rapoport citado por Leiva (2007) concluyó que en una red social solemos entrar en contacto con nuevas personas gracias a las personas con quienes ya tenemos contacto, de tal modo que los círculos tienden a cerrarse. Además, esas personas que hoy son un contacto nuevo nos pueden llevar a nuevos contactos mañana.
Debido a los grandes agrupamientos sociales formados por diferentes contextos compartidos ya sean laborales, círculo de amigos o intereses en común, la solución parece que pasa por potenciar la identificación y explotación de esas pocas conexiones que van más allá del grupo y a través de las cuales podemos descubrir todo un mundo nuevo. (Leiva, 2007). Según el mismo autor, en las redes importa la persona y los grupos a los que pertenece, pero también qué posicionamiento tiene dentro de ese grupo. A mejor posicionamiento, más capacidad para atraer nuevos nodos y para intercomunicar grupos distintos. Por lo tanto, un grupo pequeño más adelante puede convertirse en una multitud y todas las personas podrán dirigirse hacia el mismo lado.
Las redes sociales pretenden operar en tres ámbitos de forma cruzada:
• Comunicación (nos ayudan a poner en común conocimientos).
• Comunidad (nos ayudan a encontrar e integrar comunidades).
• Cooperación (nos ayudan a compartir y encontrar puntos de unión).
(Leiva, 2007). Nos habla de redes sociales horizontales: Las redes sociales horizontales son descritas por el mismo autor como las redes sociales generalistas. Es decir, aquellas que no están enfocadas a alojar un tema concreto, sino que en ellas cabe cualquier cosa: trabajo, ocio, amigos, familia, ligues, deportes, literatura… de todo puede hablarse y las relaciones pueden ser heterogéneas. Por consiguiente, dentro de esta tipología se encuentran: Facebook, Instagram y Tik Tok.
Redes sociales verticales: En contraposición a las horizontales, este autor define las redes sociales verticales como aquellas que están especializadas en un tema concreto. Puede ser más o menos restringido, pero este tipo de redes sociales intenta reunir personas en torno a un interés específico. Genviajero (sobre viajes), Cinemavip (sobre cultura audiovisual), Vitals (sobre salud, donde los pacientes hablan sobre sus dolencias, los doctores que los atienden…) o Circle of Moms (para padres y madres que quieren hablar sobre sus hijos, compartir sus preocupaciones en relación al tema, entre otros.).
Redes sociales personales: Estas redes sociales a veces son horizontales, y otras veces verticales (sería el caso de Circle of Moms). La clave reside en que el interés de la persona cuando participa en ella es personal. Es decir, no está buscando información o conociendo a nuevas personas para obtener un rendimiento a nivel profesional. (Leiva, 2007). Redes sociales profesionales: Según el autor mencionado anteriormente, en este tipo de redes las personas se mueven en las redes sociales profesionales buscando obtener un rendimiento relacionado con su trabajo: contactos para ventas, para obtener un nuevo puesto de trabajo, para obtener información específica sobre el sector en un territorio determinado, entre otros.