La fibra es un componente de los alimentos de origen vegetal que no puede ser digerido por el organismo humano. Sin embargo, tiene una gran importancia para la salud, ya que contribuye al buen funcionamiento del sistema digestivo y previene diversas enfermedades. En este artículo te explicamos qué es la fibra, qué tipos hay y qué beneficios tiene para tu salud.
¿Qué es la fibra y por qué es importante?
La fibra es la parte de los alimentos vegetales que no puede ser digerida ni absorbida por el intestino delgado. Por eso, pasa al intestino grueso, donde puede ser fermentada por las bacterias que habitan en él o eliminada con las heces.
La fibra tiene una función reguladora del tránsito intestinal y ayuda a mantener una flora bacteriana saludable. Además, la fibra tiene efectos beneficiosos sobre otros aspectos de la salud, como el control del peso corporal, el nivel de glucosa en sangre y el perfil lipídico.
Tipos de fibra
Existen dos tipos principales de fibra: soluble e insoluble. Ambas tienen funciones diferentes y complementarias en el organismo.
La fibra soluble se disuelve en agua y forma un gel viscoso que ralentiza el vaciado gástrico y la absorción de nutrientes. Esto favorece una mayor sensación de saciedad y un mejor control de la glucemia y el colesterol. La fibra soluble también sirve como sustrato para las bacterias del colon, que producen ácidos grasos de cadena corta con efectos antiinflamatorios y protectores sobre la mucosa intestinal. Algunos ejemplos de alimentos ricos en fibra soluble son las legumbres, los cereales integrales, las frutas y las verduras.
La fibra insoluble no se disuelve en agua y aumenta el volumen y el peso de las heces. Esto facilita su tránsito por el intestino grueso y previene el estreñimiento. La fibra insoluble también ayuda a eliminar sustancias tóxicas o potencialmente cancerígenas que se generan en el colon. Algunos ejemplos de alimentos ricos en fibra insoluble son los cereales integrales, los frutos secos, las semillas y algunas verduras.
Beneficios para la salud de los alimentos ricos en fibra
Los alimentos ricos en fibra tienen múltiples beneficios para la salud, entre los que destacan:
- Mejora de la digestión: La ingesta adecuada de fibra ayuda a regular el ritmo intestinal y a prevenir o aliviar el estreñimiento. Además, favorece una flora bacteriana equilibrada y saludable que mejora la absorción de nutrientes y refuerza el sistema inmunitario.
- Prevención de enfermedades intestinales: Los alimentos ricos en fibra pueden prevenir o reducir la incidencia de enfermedades intestinales inflamatorias o infecciosas como la diverticulitis o la colitis ulcerosa. También pueden disminuir el riesgo de desarrollar pólipos o cáncer colorrectal al reducir el tiempo de contacto entre las heces y la mucosa intestinal.
- Reducción del riesgo de enfermedades crónicas: Una dieta rica en fibra puede ayudar a prevenir o controlar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2 o las enfermedades cardiovasculares al mejorar los niveles de glucosa e insulina en sangre y reducir los niveles de colesterol total, LDL (colesterol malo) y triglicéridos. También puede contribuir a mantener un peso corporal adecuado al aumentar la sensación de saciedad y disminuir la ingesta calórica.
Alimentos ricos en fibra
Los alimentos más ricos en fibra son los vegetales, especialmente si se consumen con piel, semillas o cáscara. Algunos ejemplos son:
- Legumbres: lentejas, garbanzos, alubias, guisantes, soja.
- Cereales integrales: arroz integral,avena, trigo sarraceno, centeno.
- Frutas: manzana, pera, plátano, kiwi, naranja.
- Verduras: brócoli, coliflor, berenjenas.
Sugerencias para aumentar tu ingesta diaria de fibra
Empieza tu día con un desayuno rico en fibra
Elige un cereal integral con al menos 5 gramos de fibra por porción, como la avena o el salvado de trigo, y acompáñalo con fruta fresca o frutos secos.
Incorpora más granos integrales a tu dieta
Consume al menos la mitad de los granos que comes en su forma integral, como el pan, el arroz, la pasta o las tortillas de trigo integral. Los granos integrales tienen más fibra que los refinados y también más vitaminas y minerales.
Aumenta el consumo de legumbres
Las legumbres son una excelente fuente de fibra y también de proteína vegetal. Incluye frijoles, lentejas, garbanzos o habas en tus comidas al menos dos veces por semana. Puedes prepararlos en guisos, ensaladas, hummus o hamburguesas vegetales.
Come más frutas y verduras
Estos alimentos son ricos en fibra soluble e insoluble, además de antioxidantes y fitoquímicos que protegen tu salud. Consume al menos tres piezas de fruta al día, preferiblemente con piel si es posible. Añade verduras a tus platos principales o como guarnición, y opta por las crudas cuando puedas.
Haz que tus bocadillos sean saludables y con fibra
En lugar de comer alimentos procesados o azucarados entre horas, elige opciones que te aporten fibra y otros nutrientes. Algunas ideas son: palomitas de maíz naturales (sin sal ni mantequilla), yogur natural con semillas de lino o chía (que también tienen ácidos grasos omega-3), zanahorias o apio con hummus o queso fresco.